Tener un miembro de la familia racializado no convierte a dichas familias en antirracistas, sobre todo cuando las familias son ciegas al color de sus hijos e hijas. A menudo las familias con familiares nacidos y/o con rasgos de otro país sufren el denominado racismo daltónico que hace que las familias no sean capaces de ver a sus tal y como son, o lo que es lo mismo niegan su condición racial.
A lo largo de estos meses de confinamiento por la Covid-19 , un grupo de familias adoptivas y acogedoras han contado con el apoyo de profesionales en las tertulias virtuales semanales de esta Escuela, un espacio de encuentro que ha permitido a las familias expresar sus emociones, sentirse escuchadas y comprendidas, así como aprender entre iguales estrategias y recursos que les ayuden a mejorar la relación con sus hijos e hijas.
Desde el primer momentos estos encuentros virtuales dirigidos a las más de cincuenta familias andaluzas inscritas en el curso Escuela de Familias con TEAF, organizado en colaboración con Tolerancia Cero y Adopción Punto de Encuentro, se abrieron a las familias adoptivas, acogedoras y colaboradoras con hijos e hijas que han sufrido adversidad temprana en la infancia, residentes en España y América Latina. A continuación incluimos los vídeos de las tertulias.
Este cuento es fruto de la creatividad que ha florecido con el aburrimiento y de tantas horas en casa. Lo hemos hecho entre los tres, mi pareja, mi hija y yo. Al principio no sabíamos qué podía salir de la biblioteca de mi hija, pues fue como un puzzle en el que poníamos y quitábamos piezas sin tener referencia, pero poco a poco, con paciencia y entusiasmo, fuimos vislumbrando un mensaje que representaba lo que estábamos viviendo y lo que están viviendo muchas familias.
Ahí os lo queremos dejar, encantada de compartirlo para que pueda servir a otras personas en estos momentos de dificultad.
Trabajar la comunicación de determinados aspectos de la vida de los niños y niñas adoptados o acogidos en familias dependerá de la edad y de la capacidad que tengan, de su historia previa, su receptividad y su situación en el momento de iniciar el trabajo o las sesiones. Lo ideal es empezar lo antes posible a abordar su historia, siempre de manera progresiva y respetando sus tiempos.
Que el niño o la niña sea acogido u adoptado a edades más tardías, no excluye de ningún modo la necesidad de realizar este trabajo, si está motivado. Lo mismo sucede con los bebés o niños/as muy pequeños. La elaboración de un libro de vida nos puede servir de ayuda para comunicarnos con ellos acerca de su situación, inquietudes, dudas así como otras importantes cuestiones en torno a sus orígenes.
Hablar de las secuelas de la adversidad, de un pasado difícil, en la vida de niños, niñas y adolescentes adoptados es una realidad compleja y de gran preocupación entre las familias adoptivas que abarca una serie muy amplia de situaciones y genera en algunos casos problemas de conducta y vinculación en hijos e hijas adoptados. Pero ante esta realidad Charo Blanco, psicóloga con una amplia y reconocida experiencia en la atención a niños, niñas y adolescentes con trastornos de la vinculación afectiva, lanza un mensaje positivo: «Hay posibilidades de recuperación y evolución positiva en niños y niñas muy dañados. A día de hoy puedo confirmar que la terapia funciona, no es fácil, pero la permeabilidad de los niños y niñas es su principal basa».
Lo único que necesitan es encontrar un canal y un contexto que les permita externalizar su dolor y procesarlo, y unos padres y madres terapéuticos que mantengan la calma y el control en situaciones de crisis, que les ayuden a identificar emociones y a controlarse.
A lo largo de los siguiente vídeos Charo Blanco nos propone, en primer lugar, trabajar nuestra propia mochila y nos ofrece a continuación pautas para tomar decisiones y favorecer el aprendizaje y fortalecimiento de la vinculación afectiva en este tipo de crianza.
¿Cómo trabajar nuestra propia historia de vida?
Todas las madres y padres adoptivos deberían revisar su mochila, su propia historia de vida, para poder abordar la crianza de sus hijos e hijas en las mejores condiciones, señala Blanco.
Vinculación afectiva/apego
No hay que forzar la vinculación en niños y niñas adoptados con un pasado difícil con secuelas afectivo/emocionales, fruto de experiencias de abandono, sino esperar y saber que esta llegará con el tiempo, recomienda Blanco.
El éxito en la adopción depende de las madres y padres
Con unos padres y madres terapéuticos que saben entender las dificultades de estos niños y niñas que han pasado por experiencias tempranas de adversidad, marcadas por el abandono y el maltrato, «saldrán adelante», afirma Charo Blanco.
Madurez y aprendizaje para este tipo de crianza
Por último en este vídeo, Blanco plantea la necesidad de aceptar que la crianza va a ser diferente y las expectativas sobre los hijos e hijas adoptivos no se van a cumplir, como en la mayoría de las familias biológicas.