La construcción del vínculo afectivo en menores adoptados entraña una serie de peculiaridades que pueden ser explicadas a partir del análisis de la realidad de estos niños y niñas, especialmente atendiendo a cuáles fueron sus experiencias previas, las razones por las que fueron separados de su familia de origen y los efectos que todo ello ha podido tener en su desarrollo psicosocial.