Este artículo aborda el fenómeno de la parentalidad acogedora, cuáles son sus desafíos y de qué manera el acogimiento familiar puede contribuir a lo que llamaremos la resiliencia infantil.
Este artículo aborda el fenómeno de la parentalidad acogedora, cuáles son sus desafíos y de qué manera el acogimiento familiar puede contribuir a lo que llamaremos la resiliencia infantil.
Jesús Palacios nos habla sobre el apego y la comunicación en el acogimiento familiar. Señala la gran responsabilidad de reparar los daños emocionales de niños, niñas y adolescentes, uno de los restos más significativos que deben asumir las familias acogedoras, y ofrece algunas pautas para llevar a cabo esta reparación. «Muchos de los niños, las niñas y adolescentes en acogimiento familiar tienen problemas en sus conductas de apego, en su vinculación. Además estos niños y niñas se han ido formando en su interior representaciones negativas de quienes le cuidan y de ellos mismos. Aprenden que no pueden confiar en las personas adultas y que ellos no son valiosos, no son merecedores de cariño. En gran parte porque este es el mensaje que han recibido: algunas cosas que les están pasando es porque no se comportan bien, son problemáticos, no son niños o niñas buenos».
Hay muchas imágenes diferentes del acogimiento familiar en lo que toca a sus diversos protagonistas: familias de origen o biológicas, niños, niñas y adolescentes, personas acogedoras, profesionales de ayuda, técnicos de protección, responsables administrativos y políticos… Todos sus protagonistas hacen aportaciones a la idea o imagen que difundimos sobre el acogimiento familiar.
El acoplamiento familiar se define como una fase previa a la formalización de la medida de integración familiar en la que se establece un periodo destinado a que el niño, niña o adolescente y la familia seleccionada puedan conocerse, adaptarse y aceptarse mutuamente.
En esta conferencia Javier J. Múgica* sobre la intervención en el caso de adolescentes violentos, que han que han sufrido historias de adversidad en su infancia, donde la gestión familiar de estas situaciones puede resultar complicada.